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Citado en el libro "De qué hablo cuando hablo de correr" H. Murakami

viernes, 23 de mayo de 2014

Lo que tal vez no supe contar. Carta a los alumnos de Akademia

El lunes 19 tuve la gran suerte de pasar dos horas con vosotros. Viajé a San Sebastián muy temprano no conocía vuestra ciudad, pero la había visto mil veces. Conocía los detalles de los planos del Kursaal, había visto el Peine de los Vientos con toda clase de mares apacibles y embravecidos, la escultura a Fleming, la ampliación del museo de San Telmo, la iglesia, el baptisterio...pero no la conocía.

Recuerdo que cuando visité por primera vez Florencia, pensé que no era de extrañar el buen gusto de los florentinos. Me pareció inevitable que cuando uno crece rodeado de belleza, sus ojos se acostumbren a unas proporciones determinadas. Bien, con las debidas diferencias, algo así os debe de pasar a vosotros. Sois afortunados, vivís en una ciudad muy bella. De vez en cuando haced el esfuerzo de verla con los ojos del visitante, dad la oportunidad a la sorpresa. Yo lo hice con Madrid cuando volví de París. Me había entrenado durante semanas en la admiración y mi Madrid de siempre resultó ser otra distinta, mucho más interesante.

Os escribo porque cuando salí de la Universidad y mientras me daba el último paseo sin saber por dónde iba pero teniendo la referencia del mar, pensaba en lo que no os había dicho y sobre todo en lo que vosotros habías comentado y preguntado. Y algunas de vuestras preguntas merecían una respuesta más reposada, una respuesta mejor.



Si recordáis, os expliqué que cuando tuve la oportunidad de hablar con Mónica (Juegaterapia) y Gloria (Proyecto Gloria) les hice las preguntas que me habían hecho a mi otras personas y las que me había hecho yo misma. Trataba de entenderme a través de sus experiencias. Os di sus respuestas, en concreto, a la última de las cuestiones: "¿Qué te llevas de esta experiencia que haría que volvieras a repetirla?"

  • Gloria dijo: "Poder morir dignamente, en plenitud"
  • Mónica respondió: "Yo creí que era una persona feliz, pero no tenía ni idea de lo feliz que se puede llegar a ser"

Yo no os di mi respuesta. No lo hice en primer lugar, porque no estoy a la altura de esas mujeres, pero sobre todo no lo hice porque era muy personal.

Esas respuestas descubren carencias.

Además temía que sintierais que os "sermoneaba" y como ya os dije (Rorty), creo que las historias, o las canciones (que no son sino historias cantadas)  hacen mucho más por el "cambio y el progreso moral", que los tratados y los sermones.
Después de escuchar vuestras preguntas y no-preguntas, pensé que os la debía dar.

Yo me quité de encima, al menos por un tiempo, la dichosa parábola de los talentos. Y no sabéis ¡qué gozada!

Si no la conocéis, cosa que me extrañaría mucho pero puede ocurrir, os contaré que es la historia de una persona que tuvo miedo a fracasar, a no cumplir las expectativas que alguien a quien admiraba había puesto en él.
Y como temía, como no tenía garantizado acertar, decidió no arriesgar y creyó que eso sería respetado y aceptado como bueno. Se equivocó.

En el blog que os recomendé (Farnam Street) leí ayer una cita de Confucio (a veces el universo conspira y parece que todo tiene que ver con lo que uno está pensando). Decía que hay 3 maneras de adquirir sabiduría, la primera que es la más noble, es la reflexión. La segunda, que es la más fácil, es la imitación y por último está la más amarga, la experiencia.
Vosotros estáis en un ambiente envidiable pero también y quizás por eso, muy difícil.
Habéis demostrado lo mejor, ganas de aprender y por ello habéis cargado aún más vuestro horario, añadido trabajos que no os van a beneficiar en los resultados académicos. Tenéis lo fundamental, os felicito de corazón, es realmente gratificante encontrarlo, os lo aseguro. Así que no os quedéis en la imitación. Puede que sea más fácil pero no es nada divertido.

Tal vez el sistema educativo esté mal diseñado en general, tal vez se forme demasiado en la sumisión, pero no es vuestro caso, aprovechadlo.
Atreveos a estrellaros. Apuntad todos esos proyectos que me contasteis y ayudaos entre vosotros a ponerlos en marcha. Sois un grupo lleno de talento y disponéis de algo único: una edad en la que nada es definitivo.

Ojalá pudiera tener las palabras de Jobs cuando decía aquello de "stay hungry, stay folish", pero ya notasteis que no es santo de mi devoción cuando fui incapaz de apagar el dichoso mac, vamos que no me lo creo, yo "soy más" del último Gates y de su "hambre" volcada en lograr que la malaria o la polio pasen al álbum de los recuerdos, pero en serio os digo: vivir sabiendo que los talentos están enterrados a buen recaudo, es tremendamente incómodo. Da igual si al final os premian. Siempre será un error.

Así que mi consejo, si os sirve mi humilde experiencia, es que empecéis a equivocaros cuanto antes, una y otra vez. Aprenderéis a frustraros con elegancia (la frustración junto con la muerte y ciertos impuestos es lo único seguro en esta vida) y os ocurrirán infinidad de cosas por el camino.
La equivocación es tratar, a toda costa, de acertar.

Y para terminar confesaros un secreto que he descubierto recientemente: no os dé reparo pedir ayuda a los que consideráis demasiado grandes o preparados. Cuanto más inteligentes sean, más valorarán el contacto con vosotros y más capaces de ver el potencial de vuestras ideas.

Sois valiosísimos para la sociedad, así que empezad a equivocaros, por favor. ¡Os necesitamos insensatos!

Muchas gracias por un día inolvidable. Gracias por la oportunidad de conoceros, ha sido todo un placer.

Elena

PD: ah! y si necesitáis un empujoncito, siempre podéis poner esto a un volumen poco recomendable ;)

          

4 comentarios:

  1. Gracias Elena,

    Es un soplo de aire fresco poderte leer esta prosa cargada de ideas para cambiar el mundo. Mucho ánimo y sigue escribiendo. Todos lo agradecemos, aunque muchos no lo pongamos por escrito.

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  2. Gracias a ti Miguel Ángel, porque me pones el listón muy alto solo con pensar que puedes leerme :)

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  3. Para nada resulto ser un sermón, creo que supiste transmitir de una manera sencilla.
    Muchas Gracias.

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  4. Qué experiencia más estupenda conoceros Elena!
    Ánimo, cambiad el mundo :)
    Un abrazo

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